Venezuela sufrirá este año carestía y escasez de alimentos

El Universal, edición del 10 de marzo del 2011

Las consecuencias de las medidas gubernamentales de transición hacia un modelo de gestión económica socialista, empiezan a hacer mella en la producción de alimentos en Venezuela.

Cuando hace dos años, Venezuela rompió sus relaciones económicas fronterizas con Colombia, en los mercados comenzaron a escasear los vegetales frescos. Colombia suplía el déficit de la producción agrícola venezolana.

En octubre del año del 2010, el presidente decretó la expropiación de la empresa Agroisleña. Una sociedad comercial, desconocida hasta el momento por el común de los venezolanos, pero sin las cual la mayor parte de los productores agrícolas no podían llevar adelante su ciclo productivo. Agroisleña proporcionaba los insumos indispensables para la agricultura: semillas, insecticidas, herbicidas y fertilizantes; financiaba las cosechas y hasta compraba la producción.

Las consecuencias las empezamos a padecer

 

El gobierno se adelanta a la crisis de hortalizas decretando su regulación. Ver en esta misma edición https://www.eastwebside.com/gobierno-declara-de-primera-necesidad-alimentos-de-origen-bovino-y-hortalizas.html

Este jueves, el diario El Universal publica un reportaje donde se recoge la problemática del cultivo de las hortalizas. Los productores se quejan de “la falta de insumos para la actividad agrícola”.
Así lo expresa Robert Maldonado, directivo de la Asociación de Productores del estado Táchira (Apropatáchira), quien informó al reportero de El Universal “que la producción de hortalizas ha disminuido 70% en lo que va de este año, debido a que los productores no consiguen insecticidas, herbicidas y fertilizantes en cantidades suficientes para atender los cultivos de hortalizas”.

Lo que ocurre con las hortalizas obviamente sucederá con otros rubros: cereales, carnes, lacteos, etc.

La subsecuente consecuencia la conocemos: escasez de hortalizas, la cual se empieza a observar en neveras y anaqueles de mercados, supermercados y abastos.

La respuesta a esta escasez por parte del gobierno, también es previsible. Se importará, hasta de la misma China, lo que al buen entender de algún burócrata ministerial “haga” falta, para luego venderlo en operativos callejeros.

Si bien, el aumento reciente de los precios del petróleo generará ingresos adicionales, la voracidad fiscal hace prever que no serán suficientes para todos los compromisos que el gobierno tiene. Por lo que la importación de nuevos rubros de alimentos, para compensar el déficit de la producción nacional, estará caracterizada por las ineficiencias propias del modelo que se intenta implantar: poca cantidad, poca calidad, grandes pérdidas de los productos perecederos, lo que hace también prever que estaríamos a las puertas de una segunda edición del escándalo de PDVAL de los alimentos podridos. Escándalo que popularmente se conoció como el caso “Pudreval”.

Para el aumento de las preocupaciones, se suma ahora la ola de incrementos de precios de los alimentos a nivel internacional. Hace menos de una semana, la FAO informó que “los precios de los alimentos a nivel mundial subieron por octavo mes consecutivo en febrero, con alzas en todos los grupos de productos básicos sometidos a seguimiento, excepto el azúcar”

El informe de la FAO

La FAO,  espera mayores dificultades en el equilibrio entre la oferta y la demanda mundial de cereales en 2010-11. Frente al aumento de la demanda y el descenso de la producción mundial de cereales en 2010, se prevé que las reservas mundiales de grano sufran una brusca caída debido al descenso de las existencias de trigo y cereales secundarios. Los precios internacionales de los cereales han sufrido un fuerte aumento, con precios de exportación de los principales cereales que son al menos un 70 por ciento superiores a los de febrero del pasado año.
«Las inesperadas subidas del precio del petróleo pueden agravar aún más la situación, ya de por si precaria, de los mercados alimentarios», señaló David Hallam, Director de la División de Comercio y Mercados de la FAO. «Ello añade todavía más incertidumbre sobre las perspectivas de los precios, justo cuando va a comenzar la siembra en algunas de las principales regiones productoras», añadió Hallam.

El cierre de las exportaciones de trigo y otros cereales en Rusia, empuja los precios del pan

Índice de precios de la FAO
El Índice de la FAO para los precios de los alimentos alcanzó una media de 236 puntos en febrero, con un aumento del 2,2 por ciento desde enero, el récord más alto tanto en términos reales como nominales desde que la FAO comenzó el seguimiento de los precios en 1990.
El Índice de precios de los cereales, que incluye los precios de los principales alimentos básicos como el trigo, arroz y maíz, subió el 3,7 por ciento en febrero (254 puntos), su nivel más elevado desde julio de 2008.
El Índice de la FAO para los precios de los productos lácteos tuvo una media de 230 puntos en febrero, con una subida del 4 por ciento desde enero, pero muy por debajo de su nivel más alto de noviembre de 2007.
El Índice de precios de aceites y grasas subió ligeramente hasta los 279 puntos en febrero, un nivel justo por debajo del máximo registrado en junio de 2008.
El Índice de precios de la carne tuvo en febrero una media de 169 puntos, con una subida del 2 por ciento respecto al mes precedente. Por el contrario, el Índice de la FAO para los precios del azúcar presentó una media de 418 puntos en febrero, ligeramente por debajo del mes anterior, pero todavía un 16 por ciento más elevada que en febrero de 2010.
Oferta y demanda de cereales
La FAO espera que los cultivos de invierno en el hemisferio norte sean en general favorables, y prevé que la producción de trigo se incremente en cerca del 3 por ciento en 2011. Ello supone una recuperación de la producción de trigo en los principales países productores de la Comunidad de Estados Independientes-CEI. Hasta ahora, las condiciones de los cultivos de invierno son en general positivas.
Las últimas estimaciones para la producción mundial de cereales en 2010 es de 8 millones de toneladas más de las que se anticiparon en diciembre, pero aún así una cifra ligeramente inferior a la de 2009. La revisión al alza realizada este mes refleja principalmente las estimaciones más altas para la producción en Argentina, China y Etiopía.
La previsión para la utilización mundial de cereales en 2010-11 se ha revisado al alza en 18 millones de toneladas desde diciembre. La mayor parte de esta revisión refleja los ajustes para el uso industrial y para piensos de los cereales secundarios. Un mayor uso del maíz para la producción de etanol en Estados Unidos y los ajustes estadísticos para el equilibrio (desde 2006-07) de la oferta y la demanda del maíz en China son la causa principal de esta revisión.

Fuente: Redacción, FAO, El Universal

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