Arrancan las propuestas económicas … ¿y dónde está la gente?

Spread the love

Por Eduardo Martínez

Es esperanzador, que los pre candidatos presidenciales de la oposición, hayan comenzado a presentar ideas y proyectos sobre lo que serían sus políticas económicas.

Esta semana, la precandidata presidencial María Corina Machado presentó su equipo económico y las ideas básicas de sus propuestas. Lo que es loable.

Si bien las ciencias económicas han desarrollado teorías y metodologías de análisis, que llevan a propuestas concretas, las vicisitudes de los últimos años han movido los cimientos del conocimiento económico.

Las consecuencias de esta situación ha tenido como consecuencia la inestabilidad política. Está a la vista un ciclo de acontecimientos, que los analistas a atinan a compartir.

En este ciclo concurren tres sectores -uno tras otros- fundamentalmente. Una crisis económica genera problemas sociales. Estos problemas llevan a una inestabilidad política. Los gobierno, no logran cambiar las políticas aplicadas, y amarrados a esas políticas económicas que no dieron los resultados que esperaban, los llevan a aplicar reformas incompletas que no enderezan la crisis sino que la profundizan. Lo que a su vez, acelera la crisis política.

En el caso de la prolongada crisis venezolana, ante un gobierno exhausto en materia económica -que ya no puede en la vísperas de unas elecciones, proponer nuevas políticas económicas, porque si tuvieran alguna ya las hubieran aplicado- y si bien es necesario un cambio de las políticas económicas y modelos aplicados, el deterioro es de tal magnitud, que solo un cambio de gobierno puede lograr generar y aplicar las políticas económicas.

En Venezuela, este ciclo en los tres sectores: económico-social-político, nos señala que no bastan simples reformas o remiendos. Es necesario conjugar acciones en los tres sectores. No una primera y en las otras después. Lo complejo, y por eso es una crisis, es que hay que adelantarlas en forma simultánea, coordinadas e inclusivas. No se puede dejar nada por fuera, a la espera del éxito de algunas para atacar a las otras.

En los últimos 50 años, hemos malamente sobrevivido a paquetes económicos que no han pasado de ser eso: “paquetes”, que nos trajeron hasta donde estamos hoy en día.

La aplicación de las teorías y los métodos de análisis, nos ha mostrado la situación en gráficos con una simplificación de las variables envueltas. Lo que nos ha permitido visualizar los llamados “puntos de equilibrio”.  Momentos, que creemos es el mejor término a utilizar, a partir de los cuales podríamos revertir la crisis. “Crassus errarre”. (error muy grave).

Recuerdo hace unos 30 años, en que en las explicaciones que daban tecnócratas del gobierno de turno, se hacía énfasis en las empresas, las reservas internacionales, las tasas de interés y el cambio de dólar, proponían una serie de medidas económicas.

Ante esta propuesta, los representantes de las centrales sindicales preguntaron: ¿y los salarios?.

Sorprendentemente, los tecnócratas contestaron: “eso no se puede tocar ahora, porque no alcanzaríamos el punto de equilibrio. Hay que esperar a que las políticas den sus resultados, las empresas se fortalezcan, y luego pensaremos en aumentar los ingresos de los trabajadores”. Las palabras que se recuerdan son más o menos así. Pero el mensaje transmitido en aquella ocasión, su recuerdo es preciso.

Las teorías y las metodologías, son ideas e instrumentos para visualizar una situación y proyectar soluciones. Sin embargo, no son medicinas que viene en una caja que abrimos, y se las damos a tomar a una sociedad para calmar y curar sus males.

El centro de la cuestión, no está en las variables económicas. Se debe centrar en las personas. Políticas económicas que no giran alrededor de la gente, están condenadas al fracaso.

Por eso, cuando examinemos las propuestas económicas que empiezan a llegarnos, debemos preguntar y preguntarnos: ¿y dónde está la gente en este nuevo modelo?.

editor@eastwebside.com

@ermartinezd

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *