Más oscuridad que razones en la venta de participación en refinerías alemanas

Una de las refinerías de Ruhr Oel und Gas

La venta de las inversiones de Pdvsa en refinerías alemanas ha sorprendido a los expertos petroleros. El Gobierno ha razonado su decisión, aunque probablemente no haya convencido de las presuntas bondades.

Señala el Gobierno que “con la venta de la refinería Ruhr Oel and Gas con sede en Alemania, Venezuela se desprende de un mal negocio, ya que la empresa, adquirida a comienzos de los años 80, en 30 años nunca rindió ganancias al país, tampoco refinó ni un barril de petróleo pesado nacional, ni dio empleo a venezolanos”.

Llama la atención que en el caso de la refinería que opera Pdvsa en Cienfuegos, en la isla de Cuba, el Gobierno haya tomado la decisión de emplear a 15 mil trabajadores cubanos. Es obvia la pregunta: ¿cuántos miles de venezolanos trabajan en esa refinería en Cuba?

Por otra parte, durante los últimos 11 años, el presente Gobierno ha designado directores en esas empresa alemanas. Sería bueno, sobretodo para apuntalar la decisión “estratégica” del Gobierno, que estos directores rindieran cuenta pública de su gestión y explicaran la cuantía y profundidad de sus esfuerzos para que estas refinerías procesaran crudo venezolano, emplearan trabajadores venezolanos y rindieran ganancias a Pdvsa, un importante accionista.

Fue durante la visita a Moscú del Presidente Hugo Chávez, que se anunció el acuerdo con las autoridades de Rusia para la venta a este país de la participación que el Estado venezolano tiene en la refinería alemana Ruhr Oil, donde comparte la propiedad con la compañía privada British Petroleum-BP. ¿Qué saben los rusos que los venezolanos no conocemos? Porque es de dudar que esta generación de rusos se meta en una inversión para no ganar dinero.

El presidente señaló, en declaraciones a AVN, que “son negocios que hizo la Cuarta República (período constitucional 1958-98, posterior a la dictadura de Marcos Pérez Jiménez) en contra del interés nacional y desde entonces estábamos buscando un socio estratégico para vender nuestra parte en esa refinería».

En otra parte de la declaraciones, se señala que el valor de venta del 50% de la empresa Ruhr Oel and Gas, supera con creces los 1.600 millones de dólares, pues a esta suma se le deberán agregar los inventarios de crudo existentes en sus instalaciones en el momento del cierre de la operación y las facturas pendientes por pagar”.

Sin embargo, al advertir que “el monto de venta de estas plantas fue avalado por tres firmas de auditores independientes”, defendiéndose de las declaraciones de sectores de oposición, la misma nota de prensa afirma que “la participación de Petróleos de Venezuela-Pdvsa en las 4 refinerías de la mencionada empresa asciende a aproximadamente 22%, en promedio”. ¿Es de 50 ó 22% la participación venezolana?

También explica el Gobierno que en el acuerdo “una de las condiciones aprobadas en el momento de su adquisición, la empresa British Petroleum tenía el derecho a vetar cualquier intención de venta por parte de Venezuela”. Puntualizando el presidente que «BP no quería que nosotros vendiéramos y los alemanes tampoco; era un negocio redondo, pero no para nosotros».

La verdad, es que la empresa Británica British Petroleum-BP ha comenzado un divorcio concertado con Venezuela. Decidió vender su participación en los proyectos que llevaba adelante en Venezuela y, casualmente es una empresa rusa, quien se lo está comprando. ¿Cómo fue esa triangulación? No la conocemos.

Fuente: Redacción, AVN, FT

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*