Una agitada Europa –abatida por la confirmación de que la recesión ha vuelto a España, la enorme posibilidad de que Francia elija al socialista François Hollande, la incertidumbre de un nuevo gobierno en Grecia y el derrumbe del gobierno en Holanda—preocupan a la Alemania de Angela Merkel, que podría quedar aislada con sus duras medidas de austeridad.
Sin embargo, en un mensaje directo a Hollande, pero para que lo escuchen todos, la canciller alemana, advirtió que el pacto fiscal aprobado por 25 de los 27 miembros de la Unión Europea para fijar la disciplina presupuestaria es innegociable, en alusión a la demanda de Hollande, que ha sugerido revisar las condiciones si gana las elecciones.
El acuerdo suscrito y en parte ratificado por los jefes de Estado y gobierno de esos países «no se puede volver a negociar», señaló Merkel en una entrevista que publican hoy los diarios del grupo editorial alemán WAZ, la mayor cadena de rotativos regionales.
Hollande sigue favorito a la Presidencia francesa con el 53% de la intención de voto, pero la distancia con el presidente y aspirante a la reelección, Nicolas Sarkozy, se ha acortado dos puntos, según el último sondeo del instituto Ipsos.
En cuanto a España, la recesión es la segunda por la que atraviesa ese país en tres años y ya costó la elección a la anterior administración del Partido Socialista Español (PSOE). Su anuncio tiene lugar días después de que la calidad crediticia de la deuda de España fuera degradada dos niveles, de A a BBB+, por la calificadora Standard & Poor’s, que arguyó un agravamiento del déficit fiscal, preocupaciones sobre el sistema bancario y un sombrío panorama económico.
Standard & Poor’s redujo hoy las calificaciones de largo y corto plazo a los 11 bancos principales de España, como el Santander SA, el más grande de la Eurozona por capitalización de mercado.
España atraviesa apuros tras el colapso en 2008 de la burbuja inmobiliaria que había sido el motor de un sólido crecimiento durante casi una década. El país tiene ahora un desempleo de 24,4% y un déficit fiscal de 8,5% contabilizado hasta finales de 2011 que debe ser reducido a 3% en 2013.
El domingo, decenas de miles de personas efectuaron diversas protestas en España contra las medidas de emergencia y de austeridad que ha adoptado el gobierno conservador.
El mismo día, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, dijo que el gobierno continuará adoptando reformas semana a semana debido a la gravedad de la situación.
Fuente: VOA