Este lunes, la Corte Suprema permitió al gobierno de Trump, por ahora, eliminar las protecciones de casi 350,000 inmigrantes venezolanos a quienes se les había permitido permanecer en Estados Unidos sin riesgo de deportación bajo el programa conocido como Estatus de Protección Temporal (TPS).
La breve orden del tribunal no estaba firmada ni exponía las razones, algo habitual cuando los jueces deciden sobre solicitudes de emergencia. No se incluyó el recuento de votos, aunque la jueza Ketanji Brown Jackson señaló que habría denegado la solicitud del gobierno.
Los jueces anunciaron que permitirían al gobierno de Trump eliminar las protecciones mientras se resuelve la apelación del caso, lo que podría permitirle proceder con las deportaciones. Los jueces también parecieron sugerir que algunos de los venezolanos que habían podido obtener documentación de su estatus legal antes de que el gobierno de Trump cancelara el programa podrían demandar para impugnar sus deportaciones. En otro caso, los jueces criticaron el viernes a la administración Trump por intentar dar solo un día de aviso a otro grupo de inmigrantes venezolanos en Texas, a quienes intentaba deportar bajo los amplios poderes de la Ley de Enemigos Extranjeros, una ley de tiempos de guerra del siglo XVIII. La administración Trump ha acusado a este grupo de migrantes de pertenecer a la violenta pandilla Tren de Aragua.
La orden del lunes afecta a un grupo mucho más amplio de venezolanos que actualmente residen legalmente en Estados Unidos bajo los términos de un programa de la era Biden.
El tribunal se ha visto inundado de solicitudes derivadas de la avalancha de órdenes ejecutivas del presidente Trump, muchas de ellas buscando pausar o limitar los fallos de los tribunales de primera instancia que bloquean la agresiva agenda de la administración, especialmente en materia de inmigración.
Ahilan Arulanantham, abogado que representa a los inmigrantes que impugnan a la administración Trump, calificó la decisión del tribunal de «realmente impactante», especialmente porque se anunció «en una orden de dos párrafos sin justificación». “Esta es la medida más grande que ha despojado a cualquier grupo de no ciudadanos de su estatus migratorio en la historia moderna de Estados Unidos”, declaró el Sr. Arulanantham. “El impacto humanitario y económico de la decisión de la corte se sentirá de inmediato y repercutirá durante generaciones”.
Fuente: Redacción con informaciones de The New York Times, Abbie Van Sickle y Adam Liptak