Los profesores universitarios iniciaron ayer martes un paro laboral por 48 horas (martes y miércoles), convocado por la Federación de Asociaciones de Profesores de Venezuela. Es así que las aulas estarán desiertas en todas las universidades públicas.
El conflicto laboral de los trabajadores, profesores y obreros se ha extendido a todos los niveles de la educación venezolana, desde la educación básica, pasando por Media, hasta la universitaria.
Los educadores reclaman las precariedades salariales a las que están sometidos. Frente a lo cual el gobierno mantienen un silencio sepulcral. Los ministros siguen sin asumir sus responsabilidades.
Estas protestas, que estallaron el 9 de enero cuando los maestros salieron a protestar en todo el país, ha ocasionado que las actividades se hayan venido paralizando gradualmente.
Sorprende la manera en que el gobierno ignora los reclamos de los educadores. Lo que presagia, lamentablemente en un futuro cercano, una paralización total de la educación en detrimento de los estuciantes.
Más allá del tema salarial, en paralelo las universidades están caracterizadas por un virtual cierre técnico. La insuficiencia presupuestaria somete a las universitarias a un régimen de deterioro progresivo de la infraestructura, falta de dotación de los laboratorios, sin personal de custodia de las instalaciones, falta de mantenimiento de las unidades de transporte, paralización de las investigaciones académicas, entre otros servicios y actividades propias.
De seguir el gobierno sin responder a la problemática universitaria y educativa en general, inexorablemente el sector educación se paralizará.
Por Eduardo Martínez, Editor
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