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Los venezolanos tienen una gran responsabilidad el 21 de noviembre (21-N): ir a votar. Ejerciendo su derecho al voto, asumen la responsabilidad de expresarse para impulsar el cambio que el país necesita. Por ser las elecciones regionales y locales, se elegirán a los gobernadores y alcaldes. Los dos funcionarios más cercanos al ciudadano. La vida de una persona, de la familia venezolana, gira en gran medida alrededor de estas dos esferas del Estado.

Tal vez en la zona metropolitana, los ciudadanos no tienen es percepción. Sin embargo, en la medida en que nos alejamos de la capital de la Nación, nos damos cuenta en que medida nuestra calidad de vida depende de esos dos funcionarios.

Por otra parte, los propagadores del desánimo, tienen 20 años pregonando que votar ese día es un reconocimiento al ilegítimo gobierno de Nicolás Maduro. Aducen, que el régimen tiene control absoluto del CNE y que cualquier intento de participación que se haga, está condenado al fracaso.

Lo que hacen estos pregoneros, es contribuir a que el régimen se atornille aun más en el poder. Pues no tienen recato en proclamarse ganadores, sin darse por enterados de cualquier evidencia de que los resultados reales no son tales.

Ante este logro de la pérdida abstencionista, lo que están haciendo es castrar el derecho de los venezolanos de ejercer un derecho, el de votar. Porque lo más grave, es que no es un consejo lo que están dando. Es la solapada amenaza, de que si votan, se han convertido en alacranes, enchufados o vendidos. Nada más lejano de la verdad. No es un delito ejercer un derecho constitucional.

Los pregoneros del desánimo, a parte de ser responsables de una inducción al triunfo del régimen, se eximen de asumir como políticos una muy importante responsabilidad que a su vez cargan sobre los hombros de los electores: los hacen responsables de los fraudes electorales. Lo cual es grave. Puesto que defender el voto, es responsabilidad de los políticos y partidos.

El 21-N, cada quien tiene su responsabilidad. Deben asumirlas, no descargarlas sobre los electores. La Patria, se los cobrará.

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