La quiebra de Silicon Valley Bank es la mayor quiebra bancaria desde la crisis financiera mundial de 2008. Pero es poco probable que la caída del banco desemboque en una crisis financiera tan profunda y dolorosa como la que siguió entonces a la quiebra de Lehman Brothers, señala la DW en una análisis.
En primer lugar, las autoridades bancarias estadounidenses han intervenido pronto. La «actuación decisiva» de los reguladores redujo el riesgo de nuevas quiebras bancarias, declara a DW Moritz Schularick, profesor de Economía de la Universidad de Bonn.
En segundo lugar, Estados Unidos tiene hoy una normativa mucho más estricta para los bancos, especialmente para los más grandes, como JP Morgan, Bank of America y Goldman Sachs. Como resultado, los bancos estadounidenses gozan de una salud financiera mucho mejor, en contraste con sus balances excesivamente endeudados en 2008.
¿Cómo afecta la quiebra de SVB a los europeos?
«Existe la posibilidad de un contagio indirecto, pero, por el momento, no lo vemos como un riesgo específico», dijo el lunes (13.3.2023) el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, al hablar de los riesgos que plantea la actual crisis para la Unión Europea.
El regulador alemán de servicios financieros Bafin impuso una moratoria a la sucursal alemana de Silicon Valley Bank, paralizando las ventas y los pagos. En un comunicado, el regulador subrayó que la entidad no tiene «relevancia sistémica» y, por tanto, «no supone una amenaza para la estabilidad financiera.»
La rápida actuación del Gobierno británico, que facilitó la venta de la sucursal londinense del SVB al peso pesado financiero mundial HSBC, aseguró también allí los depósitos.
El índice bancario europeo que sigue las acciones de los principales bancos europeos cayó inicialmente el martes, pero se recuperó para subir un 2,7 por ciento. El índice registró el lunes su mayor pérdida porcentual en más de un año, en medio de temores de contagio.
Por otro lado, las acciones de Credit Suisse cayeron el miércoles (15.3.2023) un 24 por ciento en la Bolsa de Zúrich, un desplome que arrastró a la baja a otros valores de la banca europea. El desplome se produjo tras varias jornadas muy negativas para el banco, perjudicado por la crisis bursátil causada por el colapso de SVB. Este hecho coincidió con declaraciones del presidente del banco estatal saudí, Ammar al Khudairy, anunciando que no habrá mayores inyecciones de capital por parte de su entidad.
«Una diferencia crítica entre los sistemas europeo y estadounidense, que limitará el impacto al otro lado del Atlántico, es que las tenencias de bonos de los bancos europeos son menores y sus depósitos más estables», dijo Moody’s.
Fuente: Redacción con información de la DW