El diputado Julio Montoya, en compañía de diputado Miguel Ángel Rodríguez, denunció la intención del gobierno de Hugo Chávez de transferir las Reservas Internacionales Operativas a China, Rusia y Brasil, y repatriar la totalidad del Oro.
Para sustentar su denuncia, Montoya entregó a la prensa copia de la “Propuesta de reubicar las Reservas Internacionales de la República en países “aliados” que el ministro de Finanzas y el presidente del Banco Central de Venezuela prepararon para la consideración del presidente Chávez. El documento que contiene el Punto de Cuenta está numerado con el No. BCV-No. 142-11, MPPPF S/N, no está firmado y le fue borrada otras firmas y fechas, para que no sea detectado quien lo filtró.
Señaló Montoya que en el punto de cuenta, el ministro Jorge Giordani y Nelson Merentes, presidente del BCV, le sugieren al presidente Hugo Chávez: “Realizar las Reservas Operativas, que se encuentran en Europa y Estados Unidos, hacia bancos de China, Rusia y Brasil, en un máximo de dos meses”. Igualmente, en “Realizar las transferencias del Oro monetario perteneciente a las Reservas Internacionales, que se encuentra custodiado en el exterior, hacia las bóvedas del BCV, en un plazo máximo de dos meses”.
La transferencia de las reservas, de países occidentales donde está depositado, hacia China, Rusia y Brasil, reviste una gravedad nunca antes vista en el país. Estos tres países poseen en son acreedores de Venezuela por latos montos.
La deuda con China se acerca a los 30 mil millones de dólares. Sólo con Rusia, por la compra de armas a esa nación, es cercana a los 10 mil millones de dólares en los últimos 6 años. En el caso de Brasil, empresas brasileñas como Odebrecht, ha debido pedirle a su gobierno que presione a Venezuela para el cobro de deudas por la construcción de grandes obras públicas de infraestructura como el puente sobre el Orinoco, que conectará Cabruta con Caicara del Orinoco, y la ampliación hacia el sureste del Metro de Caracas.
Las consecuencias, de realizarse la transferencia, serán inmediatas. El riesgo país aumentara. Las calificadoras de riesgo así lo reflejarán en sus reportes. Esto encarecerá los créditos que contrate Venezuela y las emisiones de bonos. Venezuela deberá pagar más por pedir prestado.
Antes de conocerse esta transfreencia, ya Venezuela debía remunerar casi 12% para poder colocar bonos soberanos. Uno de los endeduamientos más caros, junto con los de Grecia.
El razonamiento es muy sencillo: si Venezuela retira de la banca occidental sus reservas y depósitos, los inversionistas no se sentirán seguros en comprar bonos venezolanos. A partir de este momento, los bonos venezolanos será considerados poco menos que «basura».
Fuente: Redacción con documentación entregada por el diutado Julio Montoya