La fabricante japonesa de bolsas de aire para autos Takata Corp solicitó el lunes protección por bancarrota en Japón y Estados Unidos, y dijo que buscaría una asistencia financiera por $1.588 millones de dólares de Key Safety Systems (KSS), un proveedor de autopartes con sede en Estados Unidos.
Con la declaración de bancarrota la firma dice que podría seguir proporcionando reemplazos para infladores defectuosos de bolsas de aire vinculados con la muerte de al menos 16 personas, que están en el centro del mayor retiro de productos en la historia de la industria automotriz.
El trámite abrió camino a la adquisición de la mayoría de los activos de Takata por KSS, con sede en Detroit pero propiedad de una firma china.
El presidente de Takata, Shigehisa Takada, dijo a la prensa en Tokio que ante la rápida pérdida de valor de la compañía, solicitar la protección por bancarrota era la única manera de seguir adelante.
La presentación en la Corte de Distrito de Tokio siguió a una solicitud de protección por bancarrota bajo el Capítulo 11 en Estados Unidos.
Los infladores de Takata pueden estallar con demasiada fuerza cuando llenan una bolsa de seguridad en un vehículo, lanzando metralla en el proceso. Por el momento se han retirado 100 millones de infladores en todo el mundo.
Fuente: VOA