En Portugal, la Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios-CMVM, suspendió la cotización de las acciones del equipo de futbol Benfica en la Bolsa, luego que se conociera que de la venta al Zaragoza del guardameta español Roberto Jiménez por 8,6 millones de euros.
Las autoridades regulatorias bursátiles supeditaron la suspensión de cotización, hasta que se divulgue “información relevante”.
Esta es la primera ocasión, en que un traspaso millonario de un jugador de futbol, termina en manos de un ente regulador financiero. Los escándalos han sido muchos, los millones demasiados y en este nuevo Portugal, que está revisando sus conceptos económicos, pareciera que no va a dejar pasarlos sin una investigación oficial.
Las actuaciones de Roberto Jiménez en la portería del Benfica habían sido muy criticadas en la temporada anterior. En junio del 2010, el contrato del jugador había sido comprado al Atlético de Madrid por 8,5 millones de euros. Ahora es vendido por 8,6 millones al real Zaragoza.
El Benfica informó, que ahora que la trasferencia del portero fue cerrada gracias a dos contratos: uno con el Real Zaragoza y otro con una “sociedad de derecho español”.
El monto envuelto será pagado fraccionadamente por medio de «títulos de crédito».
Estas declaraciones no fueron suficientes para la CMVM, que obviamente encuentra sospechosa la transacción. A lo que siguió una petición formal de mayores informaciones.
El Zaragoza, acosado a su vez por los acreedores, aclaró que el dinero lo proporcionó un “fondo de inversión” especializado en negocios de futbol.
Por lo explicado por el Zaragoza y el Benfica, el Zaragoza adquiere los derechos federativos del futbolista y el fondo de inversión, se queda con los derechos económicos.
Fuente: Redacción