Algunos precios al consumidor en EE.UU. como el de ciertos alimentos y el de la gasolina subieron durante el mes pasado pero de acuerdo con los datos ofrecidos este jueves por el Departamento del Trabajo la inflación sigue estando bajo control.
De acuerdo con estadísticas difundidas por el gobierno este jueves, el índice de precios al consumidor subió 0,2 por ciento en julio después de haber aumentado 0,5 por ciento en junio. Sin embargo, la inflación subyacente ha crecido el último año solo 1,7 por ciento, por debajo de la línea roja del 2 por ciento trazada por la Reserva Federal (FED).
Los precios de las frutas, hortalizas, y las carnes vacuna, de pollo y el pescado se incrementaron pero los del pan, cereales, leche, derivados lácteos, jugos y otras bebidas bajaron.
También subieron de valor la ropa (0,6 por ciento), y los alquileres y el precio de los automóviles nuevos, pero los expertos señalan que el crecimiento económico es demasiado lento y el desempleo aún elevado como para estimular la inflación.
La subida de precios al consumidor junto a una caída la semana pasada del número de solicitudes de subsidios por desempleo hacen pensar a los analistas que la FED podría anunciar el inicio de la supresión de su política de estímulos monetarios durante su reunión del 17 y 18 de septiembre próximos.
Para que la FED dé marcha atrás a su decisión de mantener las tasas de interés bajas y comprar mensualmente $85 mil millones de dólares en Bonos del Tesoro a modo de estímulo financiero la inflación tendría que trepar por encima de la barrera del 2 por ciento.
Fuente: VOA