Con un ministro de Economía, designado candidato presidencial por el oficialismo argentino, la situación de la economía del país está cada día más comprometida. Todas las semanas el ministro Sergio Tomás Massa sigue estando en sus medidas detrás de los impactos de la crisis.
En efecto, sus políticas parecieran ser “compensatorias”, y lejos de atacar el origen de la degradación de los índices económicos.
El dólar incontrolable
El precio del dólar paralelo en Argentina registró un nuevo salto en la jornada financiera del jueves cerrando a 790 pesos por unidad en las principales casas de cambio del país.
La divisa estadounidense en el mercado informal avanzó 17 pesos o 2,1 por ciento en la ronda cambiaria continuando la tendencia alcista de los últimos tres días y alcanzando así su nuevo máximo histórico.
La cotización paralela respecto del valor de la divisa en el segmento oficial registra una diferencia (brecha) de 126 por ciento, en el caso del dólar oficial mayorista usado para operaciones de comercio exterior.
Por su parte, la brecha respecto del dólar oficial minorista, habilitado para la venta al público, es de 115 por ciento.
En relación con los «dólares financieros», cotización que surge de la venta en divisas de bonos en moneda local, en cuentas bancarias dentro de Argentina así como del exterior, se mantuvieron sin mayores variaciones.
El «dólar MEP» (Mercado Electrónico de Pagos) aumentó a 694,8 pesos mientras que el segmento «Contado Con Liquidación» bajó a 720,22 pesos.
Desde mediados de agosto, la cotización de la divisa estadounidense en el mercado paralelo ha experimentado fuertes alzas.
En septiembre, el valor del dólar paralelo en Argentina ha escalado 60 pesos, un 8,21 por ciento.
Esta escalada se ha acentuado desde las elecciones primarias del pasado 13 de agosto, en las que se evidenció la intención mayoritaria de votos hacia la opción liberal, en el contexto de la venidera contienda presidencial del próximo 22 de octubre.
Acuerdo tripartito de aumento del salario mínimo
Representantes gremiales y cámaras empresarias de Argentina acordaron también este jueves un aumento en el salario mínimo del 32,2 por ciento que se efectuará de forma progresiva hasta diciembre próximo, informó la ministra del Trabajo, Raquel «Kelly» Kismer de Olmos.
La medida se convino durante una reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, con la participación de dirigentes de la Confederación General del Trabajo de la República Argentina (CGT), la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) y la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma, y estuvo avalada por el Ejecutivo.
De esta forma, el ingreso salarial que hoy se ubica en 118.000 pesos argentinos (337 dólares según el tipo de cambio oficial) pasará a ser de 156.000 pesos (446 dólares) en diciembre próximo, aumentando de manera escalonada desde octubre.
La ministra indicó que el aumento para el último trimestre del año estará distribuido «en 132.000 pesos para el mes de octubre (377 dólares), 146.000 pesos para noviembre (417 dólares) y 156.000 pesos (446 dólares) para el mes de diciembre».
En conferencia de prensa, Kismer de Olmos señaló la necesidad de «fortalecer el trabajo formal» en el país suramericano.
Además del aumento del salario, los sindicalistas acordaron junto con los empresarios elevar las prestaciones por seguro de desempleo «que pasarán del 50 al 75 por ciento del importe neto de los últimos seis salarios».
La decisión de las centrales obreras y las cámaras empresariales se produce ante un complejo escenario económico por el que atraviesa Argentina, caracterizado por una fuerte devaluación y altos índices de inflación.
Pobreza en Argentina abarca al 40,1%
La pobreza en Argentina abarcó al 40,1 por ciento de la población y al 29,6 por ciento de hogares del país en el primer semestre del año, de acuerdo con cifras actualizadas y difundidas el miércoles por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
La entidad estatal ofreció un relevamiento basado en la Encuesta Permanente de Hogares, en la cual se analizó la situación socioeconómica de 29,4 millones de personas arrojando que de este número al menos 11,8 millones se encuentran bajo la línea de la pobreza.
De esta cifra, el 9,3 por ciento corresponde a personas que se encuentran bajo la línea de indigencia, con un total de 2,7 millones de personas y 686.000 hogares en esta situación, detalló el Indec.
Si se considera la población total de Argentina que es de más de 46 millones de personas, el índice de pobreza reflejado por el Indec abarca a unas 18,5 millones de personas.
En términos interanuales, el indicador registró un aumento de 3,6 puntos porcentuales en comparación con el primer semestre del año 2022 cuando la pobreza alcanzó al 36,5 por ciento de las personas del país suramericano.
Asimismo, se evidenció un aumento de 1,9 puntos de los hogares en situación de pobreza, ya que en los primeros seis meses del año pasado cerró en 27,7 por ciento.
Considerando los grupos de edad según condición de pobreza, el Indec destacó que un 56,2 por ciento de las personas con edades comprendidas entre cero y 14 años son pobres. Asimismo, respecto del total de las personas con edades entre 15 a 29 años, el indicador de pobreza abarca al 46,8 por ciento.
Fuente: Agencia Xinhua con edición de Redacción.