Venezuela aguardaba este martes resultados de las gestiones de los cancilleres de la Unasur para reanudar las conversaciones entre el gobierno y la oposición, mientras éstas debatían la temperatura del diálogo: la oposición sostiene que está “congelado”; el presidente Nicolás Maduro, por el contrario, que está más “caliente” que nunca.
Los cancilleres sostuvieron el lunes varios encuentros con ambas partes y al final de los mismos, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, dijo por Twitter, que se ha logrado avanzar en algunos puntos de la agenda, aunque reconoció que «sostener un proceso de diálogo no es fácil».
La «comisión de cancilleres de Unasur y el Nuncio abrimos en Venezuela puentes de comunicación otra vez. Avanzamos en varios puntos de la agenda», escribió. No obstante todavía nadie ha informado oficialmente sobre lo conversado ni sobre lo acordado.
El martes pasado, la oposición se retiró de las mesas de trabajo con el gobierno y denunció las detenciones de más de 200 estudiantes en una manifestación y la falta de resultados por parte del gobierno para cumplir con los acuerdos que ya se habían logrado en la mesa.
«Pero díganme qué resultados si estamos empezando a dialogar” –respondió Maduro el lunes desde una reunión con alcaldes y gobernadores del país. “Aquí no se está negociando nada (…) aquí nadie ha propuesto una agenda fija», agregó.
«Hay toda una campaña, ‘Se acabó el diálogo’ ¿se acabó el diálogo? ‘ Se congeló el diálogo’, dicen, ¡si ahora es que el diálogo está caliente! porque hay un debate permanente de todos los temas», afirmó el gobernante.
Maduro dijo que lo que sucede es que hay “una campaña para matar el diálogo del que todos somos víctimas… una campaña de presión mediática desde Miami”.
En cambio, el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo, reiteró que es el gobierno quien tiene la palabra, “ellos deben actuar”.
La MUD entregó el domingo un resumen con «todos los detalles» que la llevaron a congelar el diálogo que se activó para tratar de buscar una solución a la crisis política que vive Venezuela y que se ha agudizado desde febrero pasado cuando se inició una ola de protestas antigubernamentales.
Entre las condiciones están el cese de la represión, la excarcelación de los detenidos en las protestas, la creación de una comisión de la verdad independiente y la liberación del comisario Iván Simonovis, entre otros.
Los cancilleres tenían previsto abandonar Venezuela el lunes dejando un comunicado que sería difundido este martes.
Fuente: VOA