por Eduardo Martínez
Editor
www. eastwebside.com
Estamos en el inicio de una grave crisis financiera. Es la primera conclusión que podemos sacar de las noticias de la última semana, sobretodo de las día de ayer.
El oro, arriba de los 1.700 dólares la onza. El petróleo cayendo a 81 dólares el barril. Toda la constelación de indicadores bursátiles cayendo entre -3% y -5%. La fórmula mágica se cumple: cada vez que se está en problemas, los inversionistas se refugian en el oro, con lo cual sube su precio en los mercados. A la vez que las materias primas ven caer su precio.
En cuanto al mercado cambiario, el dólar pierde terreno frente al euro. Ayer pasó de 1,4 a 1,42 por euro.
En esta ocasión, los bonos soberanos de los principales países caen. Esa es la característica de la nueva edición de una crisis financiera.
En el caso de la Unión Europea, el Banco Central Europeo-BCE salió ayer a comprar bonos soberanos de España e Italia. Lo que mejoró en cerca del 25% el riesgo país de esas dos naciones. (unos 100 puntos en cada caso)
En el caso de los indicadores bursátiles, con las caídas se acercan a los niveles de los inicios de la crisis financiera del 2008.
Los economistas no logran descifrar en esta ocasión, si estamos en presencia de turbulencias, o en algo más serio. No faltará quien agregue al análisis el componente ideológico, cuando lo importante es el ingrediente político.
La conclusión de la conclusión, es que esta crisis puede inducir de nuevo una recesión mundial.
En los EEUU, donde se generó el empujón hacia la crisis mundial, se espera que hoy martes el Federal Reserve tome medidas para contener la caída. Se piensa, que en el abanico de opciones el banco central de los EEUU, están nuevos estímulos monetarios para alentar el crecimiento económico, pero los analistas consideran que para que esto surta efecto debe atenuarse la inflación y que se tenga certeza que hay de verdad estancamiento económico sea permanente y la amenaza de recesión sea cierta. De lo contrario, el costo financiero de la operación sumergirá a los EEUU en mayores problemas.
En Venezuela
Las consecuencias en Venezuela son graves. La caída del petróleo en la bolsa de Nueva York el día de ayer, impactará fuertemente los ingresos del país. La semana pasada el precio del petróleo venezolano cayó más de 4%. Al caer el marcador West Texas Intermediate a 81 dólares el barril, arrastrará los precios de los crudos venezolanos.
Venezuela ene 2009 necesitaba no menos de 100 dólares para equilibrar su presupuesto fiscal. En el 2011, con promedios a 100 dólares, Venezuela ha debido de acudir a la emisión de bonos para poder cumplir sus compromisos financieros. Recordemos que provienen de la venta de petróleo más del 94% de los ingresos en dólares de Venezuela.
Ahora el petróleo se acerca a los 80 dólares. Cuando caiga por debajo de ese valor, el aparato político revolucionario del gobierno Chávez entraría en terapia intensiva.