En la continuación de la estrategia de consolidar el acoplamiento del flujo de divisas a los requerimientos reales del sector productivo y atender necesidades de la población, la quinta subasta del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) permitió que empresas relacionadas con sectores estratégicos, como alimentos y manufactura, obtuvieran acceso a recursos financieros en moneda extranjera.