Por María Elena Cabrera Armas, PhD
Recientemente el Poder Ejecutivo del Gobierno en Venezuela presentó, al Poder Legislativo, un proyecto de Ley denominado, «contra el fascismo, neofascismo y expresiones similares». Dicho instrumento no se corresponde con la acción del Gobierno autoritario y sin disenso que ha ido contra el «nunca más» que se propuso después de la Segunda Guerra Mundial y que lejos de cumplir el consenso, la tendencia ha sido, un resurgir de la izquierda tradicional y radical con pretensiones autoritarias, tan perversa como las vividas desde 1917 hasta 1980 del XXs, no sólo en Europa, sino en China, cuyo fin fue desarticular la sociedad, aunada a que estos modelos de Gobierno usan los grupos sociales que desafían el Derecho y la Ciencia Jurídica para cometer acciones que aterroricen a la familia como célula fundamental de la sociedad y, fundamentalmente, aquellos sectores que dentro de la concepción del Estado contractual, se ubican en la concepción de libertad y repudian toda acción del Estado que vaya en detrimento del bien superior como es la Libertad en todas sus expresiones, la felicidad, lo justo, lo bueno y la Justicia como fines supremos de la Ciencia Política.
El régimen totalitario del XXIs ha ido más allá de la convención interna aliándose a estructuras supranacionales y suprainternacionales del crimen organizado para poner de rodillas al mundo con el contrabando de sustancias que generan mucha riqueza para desestabilizar gobiernos; a cambio de la muerte de los segmentos más vulnerables de la sociedad como es su juventud y el uso del terrorismo como célula para desarticular las sociedades organizadas y Gobiernos responsables y solidarios.
El proyecto de ley tiene una incongruencia en su esencia que va dirigida contra la sociedad, siendo que el fascismo o neofascismo es una forma de gobernar que se desprende de las instancias de Miraflores y del Poder del Estado; pero que la sociedad civil no ejecuta y acciona.
Al contrario, desde el Estado, se le ha negado, durante estos 25 años al pueblo de Venezuela el uso y el goce del pleno ejercicio de su Libertad, conculcando Derechos y violando el deseo a tener una vida digna y honorable, expresada no sólo en salarios vitales, sino en empleos bien remunerados, como un sistema de salud y educación pública que tenga lo bienes suficientes tanto materiales como espirituales para conceder bienestar, calidad de vida y seguridad social.
Un Gobierno que no contemple el reclamo y la petición como un delito o un crimen sino como un Derecho, incluso para revisarse como Institución política que está faltando en esa máxima, no hagas a otro lo que no quieras que te hagan a tí. Entendiendo el Gobierno del Estado como el espacio de mejor equilibrio entre una Justicia individual y una Justicia distributiva y asimilando al Estado con un carácter constructivo y no sólo represivo del Poder en nombre de la hegemonía del mismo.
En el artículo 2 (#3) se pretende «prevenir y erradicar toda forma de odio y discriminación». Cómo estudiosa de la Filosofía Política debo señalar que son expresiones de contenidos distintos; el odio es un sentimiento, una baja pasión no controlada por la autonomía de la libertad de la voluntad del individuo que esté sujeto a un imperativo categórico como la moral que le permita entender al individuo con plena razón que, debe controlar para su existencia y convivencia social. Es un sentimiento que no puede ser sujeto de acción jurídica, porque la Ciencia Jurídica sólo actúa frente al accionar del individuo pero no frente al pensamiento porque no controla el ánimo que es anterior a la acción. La discriminación es una institución de naturaleza constitucional para prevenir las desigualdades sociales, exclusiones y segregaciones que atenten contra la libertad individual, su igualdad en lo político, jurídico y la búsqueda del progreso material y espiritual de los pueblos.
En tal sentido, la base de la libertad es el bienestar de la sociedad, donde la iniciativa privada en lo económico y cultural es fundamental para el desarrollo de los pueblos. Está realidad sociología fue lo que permitió construir el Estado _Welfare_ _State_ fundamentado en la cláusula Constitucional, Estado Social de Derecho que se materializó después de la Segunda Guerra Mundial que había articulado toda forma de existencia sin humanidad y que frente a la necesaria construcción social, por erradicación del fascismo, neofascismo y nazismo, fue necesario para reconstruir el espíritu del ser humano.
Es incomprensible que desde el Estado se pretenda, no sólo con el señalado proyecto, sino con la ley contra el odio considerar que hacer oposición y declaraciones de acciones injustas desde el Poder del Estado, expresada a través de los poderes públicos, sean calificados cómo discriminatorios y fuentes de odio, cuando que desde el punto de vista natural, los seres humanos no pueden pesar y actuar de forma igual, porque la propia humanidad lo determina de forma metafísica e inexplicable. Nadie puede ser obligado a ser igual a otro. Es contra Natura y atenta contra la individualidad, aun cuando, el individuo tiene dos formas de aprender a actuar, por experiencia o por semejanza que considera como buena conducta para la convivencia social.
El artículo 4 del proyecto conceptualiza el fascismo, siendo que éste no es una ideología o un dogma o una forma de vida. Es una acción que se ventila desde el Poder del Estado para controlar las masas en su generalidad y de manera sostenida para controlar hasta el pensamiento de la sociedad. Se utilizan los imaginarios épicos y batallas heróicas, a fines de sustentar un culto a la persona del Jefe político como un dios omnipresente de una sociedad para, sensibilizar a las masas con proezas y virtudes de forma retórica.
Son movimientos sociales que tienen la particularidad que cuando el individuo entra, no se puede desligar, porque es objeto de persecución como un animal, hasta el exterminio o la prisión. Igualmente es, con el opositor que en nombre, en principio, de su Derecho natural, se siente con el Derecho de reclamar acciones, incluso recurrir al Sistema de Justicia, para que en nombre de su Derecho político y ciudadano se le reconozca su libertad y derecho no reconocido, encontrándose con una puerta de tranca que, constituye el Poder Judicial por que se convierten en administradores de una Justicia de horror y de terror en nombre de un conjunto o entramado jurídico para secuestrar la conciencia del individuo y confinarlo a un determinado lugar sin oportunidades que lo inducen a buscar oportunidades en otras latitudes del planeta tierra.
lnsisto, el fascismo no es una ideología ni una doctrina, tanto que no hay una definición exacta. El Marxismo socialista es fascista en su acción, más no en su teoría porque -teoricamente- los expositores de esta Filosofía Política no plantearon la toma del Poder del Estado con Militares sino con la clase trabajadora al poder a través de la Revolución Obrera con planteamientos de la distribución de la riqueza de darle a cada quien según sus necesidades planteada en la justicia distributiva.
El fascismo exacerba el sentimiento de nacionalidad y patria a extremos que generan la muerte.
Los Estados fascistas han construido sus épicas de forma distinta, por éso, no hay una definición o concepto, éstos, sin embargo, se pueden caracterizar:
1.- Juegan sobre el concepto de las masas sociales a quién ven como un individuo. Es decir, la colectivizacion de las masas la interpretan de forma individual y, el Jefe fascista para centrar las masas populares les hace ver que -ellos- son el Jefe y, el Jefe es ellos. Es un trabalengua social.
2.- Al ser, el colectivo tratado como un individuo como una persona, todos deben -en apreciación totalitaria del jefe- pensar iguales y, él que se sale del redil del pensamiento colectivo como un individuo, está contra el Jefe militar o expresión del Estado omnipresente, omnipoderoso.
3.- Por supuesto, no hay derechos. Al considerar al colectivo/masificado como una persona, no hay odio; pero el que aprecia ese hecho contra el Derecho Natural, es calificado de que odia y, no es así, al contrario, está exigiendo que no se vea al individuo colectivizadamente, sino como un individuo/hombre, con forma de ver la vida distinta, pensar y actuar distinto y sobre esa base, hacer sus exigencias humanas.
4.- Hay una manipulación del pensamiento, por cuanto, la hegemonía del Poder del Estado es usada utilitariamente para controlar a las masas y mantenerlas bajo la unificación de un solo pensamiento.
5.- El que se opone a la colectivización es, un enemigo a destruir para el proyecto fascista.
6.- Los gobiernos fascistas mantienen dos tipos de Estado, uno real y otro hostensible. Por eso la comunidad Internacional le cuesta determinarlo. Disfraza la función y fin del Estado.
7.- El Estado fascista no cree en el diálogo, pacto o convenios. Los firma, mientras persigue un objetivo general o fin, después, los incumple.
8.- La violencia viene desde el Estado con grupos creados, incluso con legalidad para impulsar el proyecto de la parte de la sociedad que se niega a admitirlo.
9.- El fascismo se alía con la delincuencia común para cometer y perseguir al opositor y hacer ver que es un Gobierno decente que enfrenta al delito.
10.- objetivamente, al fascismo no le interesa la ley. Trabaja con decretos de gobierno para ejecutar su acción.
11.- Genera un vocabulario específico, tanto que convierte a la sociedad en grosera y fácil, al mal lenguaje y malos modales, que también es violencia.
12.- En el caso de Venezuela los programas de TV, La Hojilla, con el mazo dando, las leyes del pueblo, El kiosco de periódicos y la librería mediática, se impulsa el fascismo.
13.- El fascismo de Venezuela es distinto al Hitler, Mussolini, Stalin, Chino. Es un Totalitarismo de nuevo cuño y de difícil determinación, porque limita los Derechos sociales.
Por último, ve en el opositor un enemigo y no un ciudadano que tiene todos los derechos de exponer las irregularidades del Gobierno, si no quiere que lo llamen tirano y, no conforme al opositor, lo criminaliza hasta la muerte y la prisión sin ningún tipo de Derechos al Debido Proceso Jurídico para su defensa y sus argumentos con un experto en asistencia Judicial y conocimiento en la Ciencia del Derecho.
Sobre la base de éstos argumentos, el proyecto de ley _ut_ _supra_ , es un nuevo acto de violencia colectiva contra la sociedad civil aunado a que, contempla un sistema de penas y condenas no cónsonas con los Derechos humanos.
No puedo alegar que dichas condenas no corresponden con el sistema de la ponderación procesal penal; porque todo el Proyecto de ley es un adefecio Jurídico inadmisible en una sociedad civilizada, ordenada y con un proyecto de Justicia para la sociedad. Sí así fuera, ni siquiera se planteaba. Éso determina que estamos en presencia de seres humanos -profesionalizados- con gríngolas en los ojos para no ver la verdad de los hechos y, lo más triste, no han vivido en un ambiente virtuoso de valores propios de las sociedades avanzadas que entienden la vida humana como altar de la existencia.
* Profesora, Ciencias Políticas, Abogado, Teólogo
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