Horacio Medina: PDVSA Ilegitimidad, negligencia, corrupción y falsedad

Spread the love

horacio-medina (1)por Horacio Medina

Resulta complicado poder abordar el tema relacionado con la energía cuando en Venezuela, acaba de darse a conocer el informe confidencial del “El Instituto de Altos Estudios Europeos”, cuyo punto de partida donde se sustenta su argumentación indica que, en el lapso previo a las elecciones del 14 de abril, hubo un “vicio de nulidad que afecta a todo el proceso electoral”.

Para llegar a esta conclusión el informe confidencial de 28 páginas, divulgado tras renunciar al acuerdo de confidencialidad que se suscribe con el Consejo Nacional Electoral, critica la excesiva participación militar en el acto electoral y denuncia muchas cosas, además de precisar que la participación de Nicolás Maduro como candidato fue errónea, pues de manera muy bien fundamentada subrayan que no le estaba permitido por ser vicepresidente. “El TSJ no sólo fuerza la Constitución, al convertirlo en Presidente sin cumplir los requisitos constitucionales, legales y procedimentales sino que olvida los artículos 57 y 58 de la LOPE y 128 del Reglamento Electoral, que señalan que todo funcionario público debe separarse del cargo para postularse a elección popular. La interpretación resulta forzada e incluso sospechosa de una conducta prevaricadora”. El informe continua expresando que: “Todo acto que viole los derechos constitucionales son nulos y los funcionarios que los ordenen o ejecuten incurren en responsabilidad penal, civil y administrativa”.

Como ustedes comprenderán, resulta muy fácil para quienes hemos mantenido la tesis de la ilegitimidad de este gobierno y, por ende, considerado a Maduro como un usurpador de la funciones, amén de ser incapaz, inepto, falaz y entreguista, quedarnos en este tema vital. Sin embargo, de seguro muchos expertos en la materia disertaran y opinaran al respecto, por tanto, como nobleza obliga, nos ocuparemos de algunos de los temas relacionados con PDVSA que esta semana han copado los medios, adicionales a la crítica situación económica y financiera de la empresa, ampliamente difundida y comentada, incluso en medios internacionales.

Nos ocuparemos en primer término de unas declaraciones ofrecidas por el ilegitimo Nicolás Maduro que no pueden causar otra reacción en nosotros, más que una profunda indignación. Cuando han transcurrido más de 9 meses de la explosión ocurrida en la refinería Amuay, en el noroccidental estado Falcón, producto de una nube de gas de olefinas que causó la muerte a un número indeterminado de personas (existe una cifra “oficial” de 40 fallecidos, la cual está rodeada de dudas más que razonables sobre su veracidad) que además dejó centenares de heridos y lesionados provocando serios daños en comercios y viviendas construidas, por cierto, en zonas de exclusión catalogadas como áreas de seguridad de la Refinería, bajo la mirada complaciente y permisiva de una gerencia negligente y corrupta.

Pues bien, pasado todo este tiempo sin que se haya publicado un informe oficial del siniestro que explique debidamente las causas del accidente, este gris y maléfico personaje que ejerce de manera ilegítima la Presidencia de la República, Nicolás Maduro, aseguró el viernes 14 de junio que no tenía duda alguna que en aquel fatídico 25 de agosto de 2012, “…la derecha fascista le metió una puñalada a la refinería, que ardió y explotó“. Adicionalmente, este personaje añadió que según su teoría “…la oposición, en plena campaña presidencial para las elecciones del 7 de octubre de 2012, necesitaban un golpe de opinión pública que cambiara las encuestas”. “No tengo ninguna duda. Están en marcha las investigaciones y hay muchos indicios, pero la derecha fascista, con los aliados imperiales, fueron los responsables de ese ataque contra la Patria“.

Estas declaraciones, además de irresponsables, son malintencionadas y constituyen una burla, tanto para las víctimas, como para sus familiares. Que nadie diga que Maduro ignora la realidad que no sabe lo que dice o que alguien debería explicarle. No, Maduro sabe perfectamente lo ocurrido y sus declaraciones obedecen al libreto que por años el G2 castrista ha utilizado: huir hacia adelante y culpar siempre al enemigo. Sencillamente detestables las declaraciones del ilegitimo Nicolás Maduro e imperdonable que profesionales y técnicos, dentro y fuera de la empresa, mantengan silencio, ante tamaña ofensa, ante semejante acto de difamación y de falsificación de la realidad.

Todo un libreto que se complementa con la declaración de la compra de “18 aviones guerra en EEUU, guardados en Colombia para atacar y destruir el país (será lo poco que queda todavía)”, emitida por el cínico y perverso José Vicente Rangel, experto en tejer intrigas y crear falsas teorías. En el pasado, mejor elaboradas, pero que, ante esta declaración, se nota ya que la demencia senil, lo ocupa. Francamente, vergonzoso lo que estamos viendo en el país.

Otro hecho noticioso, por demás preocupante, está relacionado con la visita la país del recién nombrado Presidente de YPF de Argentina el Sr. Miguel Galuccio, para anunciar que la petrolera estatal YPF se unirá a la estadounidense Chevron y la venezolana PDVSA, para acometer el proyecto costa afuera de la Plataforma Deltana que le permitiría llevar gas natural licuado a Argentina. Es menester recordar que este proyecto ha sido anunciado, pautado, acordado, iniciado, etc., no menos de cinco veces.

Nos preocupa que, de nuevo, este proyecto sirva como excusa y fuente de financiamiento para negocios asociados a la corrupción. Su solo anuncio, ya significa que se destinan fondos para reestudiar, lo ya sabido y para contratar empresas, nacionales e internacionales que permitan “actualizar” la viabilidad y factibilidad del proyecto, incluyendo estudios de ingeniería, análisis de mercado, estudios ambientales, trazados de líneas, etc., todos ya realizados e indicativos de la no viabilidad del proyecto.

Hace ya una década que se aprobó la ley de Hidrocarburos Gaseosos para facilitar estos proyectos. Sin embargo, una nefasta política que se empeña en mantener la distorsión de la Matriz Energética Nacional, no lo ha permitido y, mientras tanto, el gas para el suministro nacional es cada vez menor (déficit cuando menos de mil 500 millones de pies cúbicos diarios), tanto que se importan de Colombia, justamente del yacimiento descubierto y puesto en producción por Chevron, unos 200 millones de pies cúbicos diarios para paliar el déficit de gas usado en la generación eléctrica para el estado Zulia. Bueno mencionar que este gasoducto se construyó, en la década de los 90’, para enviar gas a Colombia.

También en esta reunión, se mencionó que PDVSA exporta diésel a Argentina desde hace una década para su mercado eléctrico (la verdad es que lo compra en Rusia, a precio de mercado y lo vende en condiciones preferenciales, ya que en Venezuela no produce diésel de 0.5% de azufre, restricción del mercado argentino). Sin embargo, se indicó que ya se culminó la ingeniería básica de un proyecto para instalar una planta de regasificación en Argentina que permitirá importar gas licuado de Venezuela, donde todavía no se produce una molécula de ese gas.

Dos notas para finalizar:

El ilegitimo, Nicolás Maduro estuvo de visita en el Parque Industrial de la Zona Franca del estado Falcón, junto con Rafael Ramírez y Asdrúbal Chávez, Presidente y Vicepresidente de PDVSA, respectivamente y Ower Manrique Presidente de PDVSA Industrial, donde “supervisó”, la empresa socialista Vietven Iluminaciones (Vietnam-Venezuela), impulsada por PDVSA Industrial, que produce bombillos ahorradores de energía eléctrica.

Nos preguntamos, si en el marco de esta visita ¿se informaron sobre posibles contaminaciones por sustancias radioactivas en la zona? Los bombillos que allí se laboran contienen Torio (¿de dónde viene?). Este material y sus productos de desintegración son radiactivos, su inadecuado almacenamiento puede provocar una acumulación de gases productos de la desintegración radiactiva y la exposición prolongada del cuerpo conduce a largo plazo contaminación radioactiva que produce como síntoma primario fiebre y/o dificultad respiratoria. ¿Nos preguntamos, funcionan las estrictas normas de seguridad e higiene industrial, para el manejo de sustancias radioactivas?

La otra tiene que ver con la destitución del Presidente de CITGO, filial de PDVSA en EEUU, Alejandro Granado que fue reemplazado por Nelson Martínez. No pudo el señor Granado seguir ocultando tantos negocios fraudulentos que lo dejaban en evidencia, incluyendo las ventas de tarjetas telefónicas en estaciones de CITGO que, de manera preferencial, manejaba su señora esposa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *