Sergio Marchionne, administrador delegado de la FIAT, levantó este domingo una gran controversia en Italia al señalar que “Sin Italia la Fiat pudiera hacer más”. Aseveración pronunciada en el conocido programa dominical televisivo “Che Tempo Che Fa” conducido por el periodista Fabio Fazio.
Ningún relacionado con la Fiat quedó con un hueso sano en lo dicho por Marchionne. Sindicatos, trabajadores y hasta los mismo italianos, recibieron lo suyo.
¿Se va hacia el desmembramiento de la FIAT?
Desde hace unos meses, Sergio Marchionne ha venido desarrollando una estrategia que pudiera producir el desmenbramiento del grupo Fiat. En efecto, uno de sus primeros pasos fue separar el grupo en Italia en dos empresas legalmente distintas: una con la parte automotriz, y la otra con la parte industrial. Si bien son todavía de los mismos propietarios, la fuerza gerencial fue totalmente separada y es mantenida de forma segregada una de la otra.
Las declaraciones del domingo en la noche, pudiera ser un error político cometido por el administrador delegado, pero también una provocación a distintos sectores de la vida italiana envolviendo fines que todavía desconocemos.
Sin embargo, la marca Fiat es un orgullo de los italianos, por lo que al aseverar que a la Fiat le iría sin mejor sin Italia, probablemente Marchionne pudiera haberse extralimitado al ofender a los italianos en su conjunto.
En todo caso, recordemos que Sergio Marchionne, a pesar de ser el administrador delegado (gerente general) de la Fiat, sigue siendo siendo un empleado de los accionistas de la empresa. En cualquier momento, si se vuelve políticamente incomodo, pudiera ser relevado de su cargo.
¿Qué fue lo que dijo Marchionne?

Entre lo señalado por el administrador delegado se encuentra que: “ni siquiera un euro de los 2 millardos de las utilidades operativas, llega de nuestro país (Italia)”. “Fiat no puede continuar su gestión con pérdidas en sus propias fábricas”. “Entre el 2008 y el 2009, la Fiat ha sido la única empresa que no metió mano en la caja del Estado”, al contrario de cuanto ha hecho la competencia europea. “No quiero recibir las gracias, pero no quiero ni siquiera ser acusado de haber tenido la ayuda del Estado. Los incentivos son dinero que van a los consumidores: me ayudan también parcialmente, pero en Italia siete de cada 10 diez comptados, son extranjeros”
Igualmente, Sergio Marchionne enumeró los problemas de competitividad y productivad del sistema italiano, y negó la representatividad de los sindicados y centrales sindicales. Dos aspectos que no constituyen novedad alguna en la discusión entre empresarios y sindicatos en Italia.
Las reacciones
Las declaraciones de Marchionne encontraron inmediata respuesta de los secyores aludidos. El ministro del Trabajo, Maurizio Sacconi, dijo que “recordamos a Marchionne que Italia es un país históricamente de establecimientos del sector automovilístico donde están depositadas instalaciones y sobretodo un gran patrimonio de experiencia y profesionalidad”.
“Las palabras de Marchionne son desconsideradas en la relación de Italia y de los trabajadores que han contribuido a hacer grande a la fiat”, replicó Cesare Damiano, jefe de la comisión del trabajo del partido PD.
“La declaración de Marchionne serían coherente si la Fiat restituyera todo el dinero que ha obtenido de Italia”, comentó el responsable de la Italia de los Valores, Maurizio Zippone.
“Lo de Marchionne no es desconfianza respectoa Italia, pero si contra aquella parte del sindicato que se demuestra anti histórica y contraria a la prospectiva de desarrollo económico e industrial”, fue el comentario de Enzo Ghigo, coordinador piemontés del partido PDL.
“Ya hace doce años, gracias a la globalización, los establecimientos italianos eran pagadsos de la sutilidades brasileñas”, dijo Giorgio Airaudo, responsable auto de la Fiom.
“Marchionne debe evitar de continuar humillando a los trabajadores y al sindicato”, afirmó Rocco Palombella, secretario general de la Uilm.
Fuente: Il Corriere, La Stampa, La Reppublica, Redacción